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Asma infantil

 

Medicamentos para el asma y la osteoporosis

Los folletos Consejos para Recordar de donde fue extraida esta información han sido creados por la Comisión de Educación Pública de la Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología.

El contenido de estos folletos sólo tiene propósitos informativos. No pretende reemplazar la evaluación de un médico. Si tiene preguntas o inquietudes médicas, llame a su alergista/inmunólogo.

 

El uso de medicamentos inhalados para el asma

 

Factores desencadenantes y control del asma

 

¿En qué consiste una reacción alérgica?

 

Asma inducida por el ejercicio

 

Asma y embarazo

 

El papel del especialista en alergias o inmunólogo

 
 

La importancia de las pruebas de investigación clínica

 
 

Condiciones de la piel

 

Infecciones recurrentes o de una gravedad desacostumbrada

 
 

Alergias a los alimentos

 
 

Alergia a las picaduras de insectos

 
 

Alergia al látex

 
 

Medicamentos para el asma y la osteoporosis

 
     
     
     

Medicamentos para el asma y la osteoporosis


La osteoporosis es una enfermedad que pone frágiles los huesos. Al perder fuerza, los huesos tienen mayor tendencia a fracturarse. Los sitios más comunes de las fracturas por osteoporosis son los pequeños huesos de la espalda (vértebras), las muñecas, los huesos de los brazos, la pelvis y las caderas. Cuando ocurre una fractura, hay mayores probabilidades de que ocurran más, lo cual causa dolor, pérdida de movilidad y posible necesidad de cirugía.


¿Quién sufre de osteoporosis?


La osteoporosis afecta a más de 25 millones de norteamericanos. Las personas de edad, sobre todo las mujeres que han llegado a la menopausia, son las que corren más riesgo. Además del sexo, otros factores aumentan el riesgo de padecer de osteoporosis, como:

  • Historial familiar.
  • Raza. Los caucásicos y los asiáticos tienen un nivel de riesgo mayor que el de los afroamericanos.
  • Consumo inadecuado de calcio y vitamina D.
  • Falta de actividad física.
  • Fumar cigarrillos o beber alcohol en exceso.
  • Bajo peso corporal.
  • Ciertas irregularidades menstruales que están asociadas con una deficiencia de estrógeno.
  • Algun os medicamentos, como los de cortisona por vía oral (glucocorticosteroides) o medicamentos contra los ataques convulsivos.

¿Qué tiene que ver la osteoporosis con el asma?


Como el asma es una enfermedad inflamatoria del pulmón, el uso continuo de medicamentos antiinflamatorios es importante para la mayoría de los pacientes de asma. Los medicamentos  similares a la cortisona, llamados glucocorticosteroides, son los fármacos antiinflamatorios más potentes para tratar el asma. Los glucocorticosteroides se pueden administrar sistemáticamente por vía oral, intravenosa o intramuscular, o como tópico por inhalador, atomizador nasal, gotas para los ojos o cremas para la piel. El uso a largo plazo de glucocorticosteroides por vía oral, como la prednisona en píldoras, se ha asociado con efectos adversos, entre ellos la osteoporosis. En cambio, los glucocorticosteroides inhalados o tópicos son eficaces para tratar el asma y tienen pocos efectos adversos. Su alergista/inmunólogo está entrenado para considerar los riesgos y los beneficios de usar tipos específicos de glucocorticosteroides. Siempre recetará la dosis más eficaz de prednisona o de otros glucocorticosteroides por vía oral, si se requiere, y medicamentos inhalados en vez de por vía oral siempre que sea posible.


¿Qué puedo hacer para prevenir la osteoporosis?


Ingiera una cantidad adecuada de calcio.
El calcio se absorbe mejor si se toma con comidas en pequeñas cantidades a lo largo del día. Las fuentes más concentradas de calcio son los productos lácteos, que a veces también contienen vitamina D. Por ejemplo, un vaso de leche descremada tiene 302 mg de calcio y 85 calorías. Cuatro onzas de yogurt simple bajo en grasa tienen 415 mg de calcio y 145 calorías.
La cantidad diaria recomendada de calcio es:

  • 800 mg al dí a entre uno y 10 años de edad;
  • 1,200 mg al día entre 11 y 24 años de edad
  • 1,200 mg al día durante el embarazo y la lactancia
  • 1,200 mg al día para adultos de 24 años de edad en adelante
  • 1,500 mg al día para mujeres posmenopáusicas
  • 1,500 mg al día para adu ltos con riesgo de osteoporosis

Algunas personas carecen de una enzima llamada lactasa, necesaria para digerir la lactosa contenida en la leche. Estas personas, que tienen intolerancia a la lactosa, no pueden tomar leche. Sin embargo, algunos pueden tomar yogurt o comer queso, y también leche acidófila u otros productos lácteos a los que se ha añadido lactasa. Unas fuentes no lácteas de calcio recomendables son el tofú (150 mg/4 oz), el brócoli (cocido fresco, 136 mg/taza), col rizada (150 mg/taza), grelos (200 mg/taza) y sardinas con huesos (375 mg/3 oz).
Para las personas que no consumen suficiente calcio en su dieta habitual, se recomiendan suplementos de calcio. Pero fíjese en la cantidad de calcio elemental -la cantidad real de calcio presente- en los suplementos. Debe evitarse tomar más de 500 a 600 mg de calcio de una vez, o ingerir calcio con alimentos de alto contenido de fibra, ya que reducen la absorción de calcio. Los suplementos que contienen harina de hueso también deben evitarse, debido al exceso de fosfatos. Es mejor que el médico indique los suplementos de calcio.


Compruebe que la ingestión de vitamina D es adecuada pero no excesiva

. La cantidad de vitamina D que se recomienda usualmente es de 800 Unidades Internacionales (UI) al día. La mayor parte de las multivitaminas contienen esta cantidad. Las dosis hasta de 1,000 UI han mejorado la absorción de calcio y el metabolismo de los huesos, pero las dosis más altas no se recomiendan a menos que las indique el médico. La vitamina D se encuentra en la yema del huevo, los pescados de agua salada y el hígado de vaca, y la puede activar la exposición al sol. La vitamina D2 (ergocalciferol) es más efectiva que la vitamina D3 (colecalciferol).


Haga ejercicio

Se recomiendan ejercicios en los que hay que desplazar el peso, como caminar, subir escaleras o trotar. El objetivo es hacer ejercicios un día sí y un día no, o cuatro veces a la semana. El tiempo que se dedique depende de la intensidad del ejercicio. Para caminar, se recomienda de 45 a 60 minutos. Si ha estado inactivo, consulte a su médico antes de empezar un programa de ejercicios.


Evite fumar o consumir alcohol excesivamenteFumar cigarrillos y beber alcohol en exceso aumenta el riesgo de osteoporosis, además de otros problemas de salud.


Reemplazo de hormonas femeninas. Si usted es una mujer que ha llegado a la menopausia, la terapia de reemplazo de estrógeno puede reducir el riesgo de osteoporosis. Sin embargo, recientes datos indican que este beneficio puede conllevar otros riesgos. Consulte a su médico.

Vigile su nivel de testosterona. Si usted es un hombre y está tomando glucocorticosteroides por vía oral como prednisona, es posible que haya que medir el nivel de testosterona en la sangre para comprobar que no está bajo.


Vea a su médico. Comente la osteoporosis y cualquier otra preocupación que tenga con su médico u otro proveedor de cuidado de la salud. Si tiene varios factores de riesgo de osteoporosis, o si necesita tomar prednisona diariamente para controlar el asma, lo que incrementa la pérdida de calcio por la orina, su médico quizá necesite determinar su densidad ósea con una medición simple con un densitómetro. Su médico puede darle más ayuda, como recetar medicamentos para mejorar la salud de sus huesos.
La publicación Cómo el alergista/inmunólogo puede ayudar: pautas de consulta y referencia citando las pruebas de la AAAAI proporciona información para ayudar a los pacientes y a los profesionales del cuidado de la salud a determinar cuándo un paciente puede necesitar una consulta o un cuidado especializado del alergista/inmunólogo. Los pacientes deben ver a un alergista/inmunólogo si:

  • Necesitan confirmar el diagnóstico de asma
  • Necesitan orientación sobre el asma y sobre las técnicas de autocontrol.
  • Necesitan diariamente medicamentos para aliviar el asma.
  • No están usando los medicamentos como están recetados, lo cual limita su capacidad de controlar su asma.
  • Les gustaría tratar de minimizar su necesidad de medicamentos

Su alergista/inmunólogo puede darle más información sobre medicamentos para el asma y la osteoporosis.

 

 
       

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